Las Posibilidades de Moodle en una Escuela/colegio o Facultad/Carrera para Neófitos/Novatos Parte 3.
Hace un tiempo, tuve la gran oportunidad de acceder a esta herramienta; pude ser desde un alumno, luego tutor con permiso de edición, luego administrador y finalmente pude implementar una plataforma desde cero para una ATE en la universidad en donde estudié.
Me di cuenta de que hay muchos usos que implican distintas acciones, metodologías estrategias que son [y no son] consideradas al momento de hacer andar esta herramienta. Por otra parte pude aprender tanto de los errores como de los aciertos propios y de otros que pude vivir y observar. En este post haré mención a tres usos, a mi juicio, negativos de la plataforma y luego una propuesta de cómo se han mejorado dichos usos o cómo se podrían mejorar.
Estos son:
1. Moodle como un repositorio
2. Moodle con exceso de recursos multimedia
3. Mito de que por tener una plataforma, los estudiantes y profesores saben qué hacer por sí solos.
Este blog irá dando en tres entregas para poder hacer preciso (y menos engorroso) el tema, y esta vez corresponde a la Tercera y Final Entrega.
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En esta última parte, he querido mencionar un tema que a estas alturas de la vida, está tan vigente como variada es la percepción del uso de las TICs en Educación.
En este caso, existe el lamentable mito de que por tener una “plataforma digital que puede servirnos para flipped classroom, b-learning o elearning, los estudiantes saben manejarse y pueden averiguar qué hacer por sí mismos”; por ende los docentes deben poder hacerlo para estar al día con las exigencias de sus estudiantes.
Este tema se puede tratar desde muchos ámbitos o prismas, uno de ellos ya fue profundizado en un post anterior en donde se habló de los “Visitantes y Habitantes Digitales”, en donde se menciona que la teoría de los “Nativos Digitales” ha sido ampliamente cuestionada y que gracias a ella, ha habido una gran excusa para excluir (o excluirse) a los más adultos y exigir (o sobre exigir) competencias a los más jóvenes que no necesariamente tienen porqué traer consigo.
Como analogía, existen millones de conductores de diferentes vehículos en el mundo, pero eso no significa que todos sepamos conducir alguno de ellos aunque los veamos todos los días e incluso nos transportemos en ellos. Hasta para aprender a caminar necesitamos apoyos de otros y poder ver a quién imitar.
El otro prisma es la gestión pedagógica del material y la modalidad que implique el uso de la herramienta moodle; podríamos mencionar el elearning por un extremo y la clase invertida por otro extremo.
En el primer caso, muchas de las falencias podrían darse debido a que los estudiantes necesitan formación en estrategias de aprendizaje efectivas y en búsquedas de sentido que les permitan cursar de manera exitosa sus estudios, no de modo perfecto, pero si por lo menos satisfactorios; pero aún soslayando este aspecto, sucede que tanto las organizaciones formales, como en las informales y en las empresas, la mala gestión pedagógica (ejemplificado en la poca importancia de la moderación, la tutorización y la motivación durante la realización de los cursos) haga infructuosa la experiencia de aprendizaje; esto se puede ver en falta de instrucciones claras, falta de evaluaciones transparentes y entendibles, falta de planeación de los tiempos de realización de actividades, falta de coherencia entre actividades y objetivos, falta de respuestas oportunas a dudas, o simplemente falta de un “apresto” para conocer cómo opera la plataforma.
En el segundo caso, hay elementos comunes, por ejemplo: falta de una estructura base para poder acceder a los recursos, falta de pertinencia o importancia frente al modo presencial (si se tiene una plataforma digital que reemplaza a los cuadernos, debe permitir también poder trabajar con ellos, de lo contrario es redundante, optativo y engorroso), falta de dispositivos para acceder tanto en el lugar de estudio como en los hogares, falta de conectividad, falta de coherencia en las instrucciones / actividades /objetivos o simplemente una repetición de lo realizado en el aula presencial. Para el trabajo de la clase inversa hay gran literatura que apoya la idea de que los contenidos conceptuales y de categorías cognitivas elementales pueden entregarse o reforzarse con los medios digitales, para dar pie a un momento presencial mayoritariamente activo, constructivo, significativo y pertinente a los objetivos de aprendizajes planteados. Esto incluso puede dar paso a evaluaciones de diversa índole tanto dentro como fuera del aula.
Para ir cerrando esta serie de posteos, quisiera plantear que Moodle en sí no es más que una herramienta con muchas potencialidades como también puede tener defectos; pero dependerá de la inteligencia, la colaboratividad, las necesidades y las oportunidades de desarrollo lo que permita poder acceder a ese abanico de posibilidades para trabajar en pleno sentido educativo utilizando dicha herramienta.
No es necesario tener expertos de doctorado en el tema, aunque seguramente más de una conversación puede ser de gran ayuda o servir de apertura de mente y de ideas; lo que si es necesario es tener disposición a aprender y a practicar lo aprendido. Para ello existimos muchos profesionales de distintos ámbitos con quien poder aprender de experiencias buenas y no tanto, y por qué no, crear, participar, implementar y ejecutar proyectos en conjunto.
Una vez mas, te invito a compartir los post de este blog y también a comentarlo¡todas las sugerencias, correcciones y comentarios son bienvenidas!
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